La Web Social es una “tendencia”
compartida por las Tecnologías de la
participación, como las denomina muy acertadamente el autor de las 10
claves de la Web Social[1].
Los internautas, sin precisar unos conocimientos específicos previos ni una
coste económico significativo, se transforman en actores, en sujetos
protagonistas de la web y se amplía el espacio público de conexión y
colaboración entre personas de forma fabulosa.
Para ello, las herramientas tecnológicas
deben estar orientadas al usuario, de forma muy genérica, para que su uso sea
tan fácil que no suponga una exclusión para la inmensa mayoría. Asimismo,
también requiere que estas herramientas den respuesta a la gestión de los
contenidos que se van a generar, sin que exista un liderazgo centralizado de
esta función. Publicar contenido en la web es fácil: texto (blog), vídeo
(youtube), fotos (flickr), etc. Con el lenguaje de marcado XML y el
comportamiento activo de los internautas etiquetando los contenidos que
publican, los datos estarán dotados de significado y las aplicaciones podrán
gestionarlos.
En un contexto analógico, el texto es
lineal; y diría que además el hecho de la escritura es primordialmente
individual. Incluso en un entorno digital (fase 1.0), los documentos
colaborativos solo eran posible en un círculo acotado, por ejemplo, en una
intranet corporativa o en una herramienta de tramitación en una organización.
Pero era impensable que personas que no se conocen, cada uno en un punto del
mapa, sin necesidad de acceder a una red específica, pudieran colaborar de
forma libre y espontánea en la redacción colectiva de un texto. Es una
extraordinaria oportunidad con múltiples aplicaciones la que ofrece la web 2.0:
profesional, de aprendizaje, de creación artística… que completa las opciones para
practicar, en este caso, la escritura colectiva.
Como se dice al final del vídeo[2],
la web 2.0 nos está haciendo repensarnos algunas cosas: la privacidad, el
comercio, el amor… El vídeo se publicó en 2007 y, aunque está totalmente
vigente, podríamos añadir a la lista otros elementos sobrevenidos a raíz de la
crisis que vivimos desde hace unos años. Y es que creo que las nuevas
tecnologías, especialmente la web 2.0, está jugando un papel importantísimo al potenciar
la construcción de la ciudadanía y contribuir a la promoción y desarrollo de
una mayor participación y democratización de la sociedad. Su uso funciona como
vehículo para plantear
la posibilidad de pensar en caminos de reconstrucción de la democracia, y
fortalecimiento de la ciudadanía.
Además de las claves identificadas por Merlo-Vega en el artículo citado, creo que existe un componente emocional
propio de sociedades urbanitas, que generan fenómenos sociales de soledad en el
“mundo físico” difíciles de solucionar; pero que en el “mundo digital” sí que
encuentran canales de comunicación y encuentro con otras personas sin
demasiados impedimentos. A veces, este tejido relacional originado en la Web
Social también logra desenvolverse en el plano físico: una combinación mucho
más completa.
[1] MERLO VEGA, José A. Las diez claves de la Web
Social [en línea]. Nota ThinkEPI, 18 febrero 2008. Disponible en: http://www.thinkepi.net/las-diez-claves-de-la-web-social
[2] Vídeo en YouTube. Web 2.0... The Machine is Us/ing Us (español): http://www.youtube.com/watch?v=PL-ywltLjzk&feature=related
